DE LA PREOCUPACIÓN AL SUFRIMIENTO HAY UN PASO

La situación roza cualquier calificativo que queramos darle. La unidad en el equipo brilla por su ausencia. Es como si en un barco de remeros, cada uno de éstos rema de una forma diferente, el barco no va a ningún lado. Si con dos derrotas consecutivas gritábamos una reacción, con cinco que tenemos que hacer. Hasta el discurso de la cabeza visible hace que la preocupación se convierta en sufrimiento, puesto que hemos pasado del “SI o SI” al “ahora más que nunca hay que ser sevillista”. Sr. Presidente, su ambición nos hizo volver a ser grande, no baje ahora los brazos.

Y a pesar del resultado final, el partido comenzaba con un asedio constante hacía la portería rival. El dominio era casi absoluto, inclusos con llegadas claras de gol. Cuando no era Alves quien detenía, estrellábamos el esférico al travesaño. Llego el penalti, maldito penalti, porque a raíz de no materializarlo Kanoute, al equipo le entró el canguele y perdió los papeles. Partido roto, sin control, donde las ocasiones se sucedían en ambas porterías y donde Palop se tuvo que emplear a fondo para aguantar las envestidas, terminaba los primeros 45 minutos con la sensación de que podíamos ganar pero lo pasaríamos mal. Comienza la segunda mitad y no da tiempo para pensar en nada, el equipo almeriense se pone por delante en el marcador y se acabó el partido, volvemos a la misma apatía de días atrás, como pollos sin cabeza por el terreno de juego, los nervios parecían inundarles. El equipo buscó y buscó el empate, sin acierto. Llegó el Segundo de la UD Almería y se acabó todo. De nuevo el desastre llegaba a Nervión. Nos volvían a sacar los colores, el penúltimo de la clasificación, el mismo que hasta ahora tan sólo había conseguido 1 victoria se parecía más al AC Milán de sus mejores tiempos.

Decía Martín Cáceres al termino del encuentro “los culpables somos nosotros”, a pero que me toman por tonto. No les pondré el seudónimo de “mercenarios”, primero porque hasta un mercenario hace su trabajo para ganarse el sueldo, cosa que ellos ni hacen y segundo porque sería hasta un halago. Déjense de niñerías dentro del vestuario y pónganse de una vez por todos los monos de trabajo, ganen el salario como es debido, porque hasta ahora estáis dejando mucho que desear. Yo no pido que demuestren lo que al club les ha costado, puesto que ellos no se ponen el precio, pero si que se ganen el jornal como es debido.

¡¡¡AHORA Y SIEMPRE…SEVILLA FC!!!