Cada vez entiendo menos de fútbol, pero que le vamos hacer. A mí si algo me gusta es ver a mi equipo ganar. Sólo me importa la victoria. Siempre he dicho que por encima de todo, ganar si o si. Pero no nos engañemos, jugando como lo hicimos ayer, se darán más resultado negativo que positivos. Ayer salió bien, pero por ese camino habrá otras tantas, que nos saldrá muy mal, de esta manera solo podemos abrazar una suerte que en la mayoría de las veces nos es esquiva. Yo puedo entender que ante un equipo de esos que te asfixian, que no te dejan ni moverte, que te presionan hasta la eternidad porque su técnica es muy escasa, entiendo que nos cueste mucho ganar, a todos les pasa, pero macho, que el equipo almeriense no tenía ni una cosa, ni la otra. Nosotros mismos nos estábamos lapidando desde el minuto cero.
No sólo vi un equipo sin actitud ninguna, sino que a veces me costaba entender como entrenada y/o preparaba éste quipo los encuentros. Indecisiones y pérdidas de balones a raudales. Parecían pollos sin cabeza. Cada uno a su bola. Sólo la calidad individual hacía llegar con peligro en contadas ocasiones. Donde en la distancia se veía a un Negredo sólo en la isla, y desesperado porque no le llegaba nada, y cuando le llegó, no supo o se la paraba Alves. Varas salvaba una vez más el resultado con una magistral intervención. Y la nota negativa, venía de la mano de dos lesiones, dos bajas importantísima para lo que resta de temporada, al tiempo. Rakitic y Cáceres, el primero por su propio pie, el segundo en ambulancia abandonaba el estadio. Y desde aquí aprovecho para darle ánimos y una pronta recuperación. La enfermería se nos llena, de hombres importantes en el plantel.
Tuve la ocasión de verlo in situ. Llegue ronco, ya dije que me dejaría la garganta animando a mi escudo del alma. Nos dimos cita un buen número de sevillistas, todos animando, cantico tras cantico, desde una hora antes del encuentro hasta treinta minutos después del mismo. Somos una hinchada ejemplar y ayer dimos buena imagen de ello. Fue gracioso oír a una afición, la del Almería recordarnos que estábamos fuera de Champions, cuando ellos se van a segunda, ¿se puede ser más patético?. Aún así el día transcurrió con normalidad, no hubo nada del otro mundo en comparación con otras ciudades vecinas. Lo más curioso fue ver como dos almerienses, al vernos ataviados con las casacas sevillista, se preguntara uno a otro si el Almería jugaba ese día con el Sevilla FC, corroborándolo mirando la prensa. No me sorprende que la UD pase por las calamidades que pasa. Disfrute de una importantísima victoria, cuyo resultado vimos peligrar más por la falta de actitud de nuestro propio equipo que por meritos del rival.
Y ahora, sólo pensar en el Real Mandril. La caverna capitalina no nos dejara de bombardear, eso si después del Martes. Una vez se consuma la eliminación del conjunto entrenado por el payasete, al menos eso espero yo, vendrán a darnos pal pelo a nosotros, lo suyo sería sacar otro de esos videos a que tanto les gusta examinar y sacar sus propias conclusiones, aunque sean absurdas, porque para éstos lo importante y primordial es montar el circo.
3 comentarios:
Totalmente de acuerdo, asin no creo que se pueda ver futbol, con uno mas que estuvimos parecia que en vez de expulsar a uno de ellos nos lo habian expulsado a nosotros, digo lo mismo que tu pienso dejarme la garganta animando a mi equipo hasta la muerte SEVILLA FC. Eres grande Pirata.
EROTISMO SEVILLISTA un blog con fotografias muy recomendable http://erotismosevillista.blogspot.com
Si jugamos todo el partido con uno menos, y no hace falta nombrarlo para saber quien sobraba. Porque éste es dejar de jugar y no veas como se vuelve a inflar.
Publicar un comentario