LLEGÓ LA REVOLUCIÓN…

Y volvemos a estar en una nueva semifinal de copa del rey. Felicidades SEVILLISTAS, lo conseguimos. Y que pase el siguiente sea quien sea. Porque si la mano negra no lo impide, confío en que nuestro Sevilla FC vivirá una nueva final. Lo dije por activa y por pasiva, ahí están los post, el Villarreal no es superior a nuestro Sevilla FC, no lo ha demostrado y hasta ahora sigue sin demostrarlo. Y a pesar de todo, además de estar contentísimo, tengo una sensación extraña, y se porque me pasa, ¿Por qué en la copa si y en liga no?, ¿¡¡¡porque se ha tardado tanto en cambiar el sistema!!!?.

Del partido que voy a decir si el resultado habla por sí sólo. El míster hizo una revolución táctica y de titulares. Presencia masiva en defensa y en el medio, con un solo punta y sin extremos puros. ¿Desde cuándo no jugábamos sin extremos?, no lo recuerdo, a lo mejor me falla la memoria. Otra gran noticia, Sergio Sánchez titular, y gran partido, impresionante, me alegro muchísimo por él, es una gran noticia para el sevillismo, su aportación será importante. Gran encuentro en general, aunque hay que destacar la labor del tridente de mediocampo, el gran remate de Kanouté y trabajador nato como Negredo, que a pesar de no marcar, medio gol del primero es obra suya. Alexis una vez más haciendo gol, destacándose como el defensa goleador. Aún así, el dibujo táctico creció a todos los que disputaron la eliminatoria.

No sabremos como lo hará el próximo sábado, ante el Levante, pero para que cambiar, si ha funcionado, también es verdad que no todos los rivales son iguales.

Noche mágica para el sevillismo, disfrutemos pues. El próximo rival, saldrá mañana del enfrentamiento entre Real Mandril y Patético de Madrid. El resultado de ida le da ventaja al equipo merengue, seguramente nos enfrentaremos a éstos, y tengo la sensación de cómo dije antes, si la mano negra no lo impide, podemos dejar al Mandril en la cuneta y volver a disfrutar de una nueva final. Pero bueno esto todavía queda lejos. Disfrutemos de ésta noche, que no nos lo quita nadie.